Introducción

Hemos realizado juntos un gran viaje por LinkedIn, que espero que haya disfrutado y le haya resultado instructivo. Ahora, en este último capítulo, me gustaría hablar de algunos temas de actualidad, algunos de los cuales están ocupando titulares y con los que tendremos que lidiar a partir de ahora.

Veremos aquí:

las inteligencias artificiales;
las prácticas llamadas responsables (tanto digitales como de comunicación);
la importancia de la desconexión.

Mi objetivo no es oponerme a ellos ni imponerles mi punto de vista. Al contrario, me gustaría aportar algo de luz sobre estos temas, que son objeto de debate habitual. Así podrá decidir qué herramientas quiere probar y cuáles no o también, por ejemplo, qué prácticas quiere incorporar a su rutina.

En definitiva, que sea Vd. quien tenga la última palabra.

La inteligencia artificial

Antes de seguir adelante, empecemos por definir la IA. Según el Parlamento Europeo:

La IA se refiere a la capacidad de una máquina para reproducir comportamientos asociados a los humanos, como el razonamiento, la planificación y la creatividad.
La IA permite a los sistemas técnicos percibir su entorno, gestionar estas percepciones, resolver problemas y actuar para alcanzar un objetivo concreto. El ordenador recibe datos (ya preparados o recogidos a través de sus sensores, como por ejemplo una cámara) los analiza y reacciona.
Los sistemas dotados de IA son capaces de adaptar (más o menos) sus comportamientos analizando los efectos de sus acciones anteriores, trabajando de forma autónoma.

Fuente: https://www.europarl.europa.eu/topics/es/article/20200827STO85804/que-es-la-inteligencia-artificial-y-como-se-usa

Aunque llevamos oyendo hablar de ChatGPT solo desde 2022 (para el gran público), entendemos que la IA forma parte de nuestra vida cotidiana desde hace mucho más tiempo.

Desde dispositivos activados por voz hasta filtros de correo electrónico: todas las bandejas de entrada, si no la mayoría, ofrecen a los usuarios la opción de clasificar el spam y marcar mensajes especiales. La IA ha avanzado tanto en los últimos años que ya ni siquiera nos damos cuenta de hasta qué punto interviene en nuestra vida cotidiana como humanos, tanto...

Prácticas llamadas responsables

El término "responsable” nunca ha sido tan popular, ¡y mejor que así sea! En las últimas décadas (ya era hora), nos hemos dado cuenta de la responsabilidad que el humano tiene en muchos ámbitos.

Tecnología digital responsable: ¿de qué estamos hablando?

La tecnología digital responsable o el uso responsable de la tecnología digital se refiere en última instancia al uso de la tecnología, los dispositivos y los servicios digitales de forma que se reduzca el impacto medioambiental negativo, se fomente la inclusión social y se respeten los derechos humanos. Esto significa tener en cuenta los aspectos éticos, sociales y medioambientales en el diseño, desarrollo, uso y disposición de las tecnologías digitales.

La tecnología digital responsable pretende:

reducir la huella de carbono y los residuos electrónicos,
fomentar la accesibilidad digital para todos,
proteger la intimidad y los datos personales,
fomentar la transparencia y la responsabilidad en el uso de la inteligencia artificial,
y, por último, promover una cultura digital ética y responsable.

Se trata de un enfoque global que implica a todas las partes interesadas en el ámbito digital, incluidas empresas, gobiernos, organizaciones sin ánimo de lucro y usuarios finales.

¿Qué es la comunicación...

Desconexión

En 2024, los usuarios de redes sociales pasaron 2 horas y 23 minutos al día conectados a estas plataformas, según el Global Digital Report 2024, centrado en el uso digital y publicado por We Are Social y Meltwater

Aquí tiene otros datos interesantes sobre el uso de las redes sociales a nivel mundial.

Hay cinco mil millones de usuarios activos, lo que equivale al 62,8% de la población mundial,
este número de usuarios aumentó en 2024 un 5.6% respecto a 2023,
de media se dedican 8 minutos menos respecto al tiempo medio de 2023 (que fue 2 horas y 31 minutos),
se utilizan una media de 6,7 plataformas al mes.

Fuente: https://wearesocial.com/es/blog/2024/01/digital-2024-5-billiones-de-usuarios-en-social-media/

Podríamos seguir con esta larga lista de cifras y estadísticas, pero ya habrá comprendido lo principal: pasamos mucho tiempo frente a las pantallas, la barrera entre el uso profesional y el personal es tenue, el teletrabajo ha aportado muchas cosas buenas al diseño y organización del trabajo (bajo mi punto de vista) si no fuera por el tiempo que dedicamos a las pantallas, que no hace más que crecer... a no ser que sea muy disciplinado/a y consciente de la necesidad de hacer pausas.

Es importante para mí compartir esta última opinión, ya la guardará Vd., seguro, en el cajón que corresponda de su memoria.

Recuerde desconectar regularmente...

Conclusión

Con esto concluyo mi contribución a su exploración de LinkedIn. Espero que, como yo, encuentre sus usos favoritos y gane confianza en esta herramienta excepcional y llena de promesas. Este último capítulo sobre la IA y los contenidos responsables me ha parecido esencial para completar el tema.

No olvide nunca que la red LinkedIn es un canal de comunicación como otros, y que le interesa integrarlo en su estrategia de comunicación y, más ampliamente, en su estrategia global. Debe apoyar y complementar las acciones que realice en LinkedIn. Esta vez, ya verá, ¡será realmente mágico!

Para completar este libro, he pedido a cuatro profesionales que utilizan LinkedIn que me expliquen cómo lo usan y cómo perciben la red. Les dejo en buenas manos. Gracias a todos y cada uno de ellos por acceder a hablar de sus experiencias.

Le deseo mucha suerte en LinkedIn y que tenga tan buenas experiencias como yo he tenido.

De la inteligencia artificial al contenido responsable